He leído, Los amores lunáticos, y la verdad es que me ha gustado mucho y me ha llamado mucho la atención que uno de los protagonistas se enamora a primera vista de una chica gótica, a partir de esto, yo he escrito este cuento.
El amigo de Carlos que se llama Pablo, se enamora nada mas ver a esa chica, que en su segundo encuentro iba vestida toda de negro, con el ombligo al aire, y unos pantalones muy ajustados. Aunque no lo pareciera era una chica muy dulce y cariñosa. Esta chica iba con otra a su lado que resultó ser su hermana que iba vestida mas o menos como ella. Iban conversando alegremente y una de ellas se dirigió a la que había robado el corazón a Pablo, llamándola Catrina. Al escucharlo Carlos y Pablo descubrieron el nombre de la chica.
Catrina y su hermana dieron la vuelta a la manzana y Carlos y Pablo las siguieron, tras caminar un rato detrás de ellas tuvieron la valentía de acercarse y entablar conversación. Después de unos minutos de preguntas en las que se presentaron y dijeron algunas tonterías, continuaron juntos el camino hasta llegar a un parque, donde estuvieron conversando amigablemente y parecía que Catrina estaba interesada por Pablo porque veía que Carlos a su vez se sentía mas ajusto con su hermana, aunque en realidad el que de verdad le gustaba era Carlos.
Durante el resto de la semana no se pudieron ver porque los cuatro estaban muy ocupados en sus respectivos colegios, por eso quedaron para verse el fin de semana. El sábado Catrina llamo a Pablo y volvieron a quedar los cuatro para pasar juntos la tarde a ver si de este modo Catrina conseguía llamar la atención de Carlos. Al día siguiente volvieron a citarse para ir juntos al cine pero Catrina estaba algo decepcionada porque veía que Carlos seguía mas interesado por su hermana y a su vez Pablo seguía enamorado de ella. Ese mismo día por la noche volvieron a salir juntos y Pablo le declaro su amor a Catrina, la cual dándose cuenta del daño que le estaba haciendo reconoció que su interés por él no era verdadero sino que era una tapadera para intentar conseguir a Carlos, que seguía interesado por su hermana. Cuando Pablo conto a Carlos lo que había sucedido decidió que para preservar su amistad y evitar problemas no volverían a ver a las dos hermanas.
